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miércoles, 28 de octubre de 2009

Tuxtla Gutiérrez (Guti), recorriendo el río Grijander en lancha y demás aventuras sin mayor interés


En efecto. El domingo 25 llegué a eso de las once de la noche a la pintoresca ciudad de Tuxtla Gutiérrez, la capital del estado de Chiapas y la población con más población. Lo cierto es que no es una ciudad demasiado atractiva y lo más interesante se encuentra por los alrededores, como el Cañón del Sumidero, cercano a la población de Chiapa de Corzo, un impresionante cañón natural formado por las aguas del río Grijalva.

Como veo que no me seguís el ritmo, dejaré que las imágenes hablen por mí.


La encalada catedral de Tuxtla


En una calle cualquiera


Abre los ojos




El embarcadero de Chiapa de Corzo


Que suba el siguiente


De puente a puente


La estalactita con forma de caballito de mar



Ay, quién maneja mi barca


Apuntando hacia el cañón


Grijalva abajo


Paredes de granito



La cascada 'árbol de navidad'


Más de lo mismo


Bajo el árbol


Dos pájaros a tiro


El Cristo de la gruta


Y al final, el final


Después de tres días por Tuxtla Gutiérrez y sus alrededores, el miércoles 28 de octubre emprendí camino hacia la población de San Cristóbal de las Casas, también en Chiapas, pero eso es ya otra historia...


El brujo Lalo

3 comentarios:

Pilarica dijo...

Eeeeehhh!!! Qué pasa? Una semana sin decir ni pindorro por aquí... No hagas pelota que luego te vas a dejar las cejas en el ordenata explicando cositas...

Queremos más!!! Odo!!

Besos ansiosossss... Aaagghh!!

MARKO BREGOVIC dijo...

Jajajaja, Pilarcita, no presiones al muchacho con exabruptos de marciaaaaaaaaaal! ¡Déjalo que se aventure a su manera, y cuando vuelva entramos a las 8:00 en el leche, pedimos unos botellines blancos y que no cuente pelos y señales, y monjas asesinas! petonets!

Eduardit dijo...

Las cosas de palacio van despacio. Esto es así, hay etapas internáuticamante aliñadas y otras que no, como la última semana transcurrida por tierras guatemaltecas. Tampoco me parece mal lo que apunta fumungus, aunque en breve recuperaré el tiempo perdido y pondre al día mis andanzas.